Inter de Milán disputará la gran final de la Champions League luego de haber superado al FC Barcelona en una eliminatoria épica en la cual remontó gracias a un agónico gol de Francesco Acerbi.
Si bien Davide Frattesi fue el jugador que anotó el tanto de la victoria para el Inter de Milán, la remontada del cuadro neroazzurro no hubiera sido posible si Francesco Acerbi no hubiera aparecido para mandar el encuentro a tiempos extra.
Después de haber salvado a Il Biscione, el central italiano de 37 años de edad acaparó portadas en Italia y en el mundo entero, por lo que su emotiva historia de superación ha salido a la luz.
Francesco Acerbi, de luchar contra el cáncer y la depresión a disputar una final de Champions League con Inter de Milán
Aunque hoy en día Francesco Acerbi es uno de los mejores defensas no solo del Inter de Milán, si no que de toda Italia, el central nacido en Vizzolo Predabissi tuvo que superar varios obstáculos para llegar hasta donde está.

En al temporada 2012/2013, Francesco Acerbi jugó con el AC Milan, acérrimo rival del Inter de Milán, pero fue en aquella época que comenzó a tener problemas con el alcoholismo, enfermedad que padeció después de caer en depresión por la muerte de su padre.
Después de su paso por el cuadro rossonero, el defensor italiano llegó al Sassuolo, club en el que recibió una noticia que le cambió la vida, ya que los exámenes médicos y físicos salió a la luz que padecía cáncer testicular.
Luego de haber sido operado de urgencia, la enfermedad desapareció por un tiempo, pero a finales del 2013 esta regresó y el futbolista se tuvo que someter a tratamientos de quimioterapia.
La terapia psicológica fue vital para que Francesco Acerbi hoy esté brillando con el Inter de Milán
A pesar de que el regreso del cáncer lo pudo haber terminado de derrumbar, Francesco Acerbi confesó a la Gazzetta Dello Sport que un ataque de pánico que sufrió fue lo que lo hizo reflexionar sobre todo lo que pudo haber hecho mejor en su vida.
Desde las oportunidades que desaprovechó, los excesos que tenía y los difíciles momentos que hizo pasar a su familia hicieron que abriera los ojos y pidió ayuda psicológica para lidiar con la enfermedad que atravesaba.
Una vez recuperado, el defensor adoptó un estilo de vida saludable que le permitió mostrar su mejor versión dentro del campo y fue con la Lazio con quien logró asentarse y convertirse en uno de los mejor defensas de toda la Serie A, por lo que llamó la atención del Inter de Milán.