El Salvador fue una de las Selecciones que no consiguieron el boleto al Mundial del 2026, situación que generó la furia de sus fans, los cuales buscaron responsables por este fracaso y señalaron al Bolillo Gómez, director técnico que se vio en el ojo del huracán luego de ser visto cuando felicitaba a los jugadores panameños por el boleto a la Copa del Mundo mientras su equipo había quedado fuera.

La frustración de los fans de El Salvador llegó a su punto más álgido cuando algunos acudieron al hotel de concentración de su equipo y gritaron consignas contra el Bolillo Gómez por la eliminación de las eliminatorias de Concacaf, lo que desató una serie de empujones y golpes entre el propio técnico, personal de seguridad, policías y aficionados.

El Bolillo Gómez peleó con aficionados

El Bolillo Gómez fue uno de los primeros de la delegación salvadoreña en caminar hacia la entrada del hotel de concentración y ahí, aficionados lo confrontaron mientras uno de ellos grababa con su celular. Su acción no le gustó al entrenador colombiano, que primero los saludó, pero poco después peleó con ellos.

“Clasificaste a Panamá dos veces, felicidades. Sólo a traer billete de El Salvador Fuiste. Felicidades, Bolillo”, gritó uno de los aficionados, lo que molestó al Bolillo Gómez y a la persona que lo encaraba, quien calificó de “imbécil” al hincha que le gritó al entrenador del conjunto salvadoreño, al mismo tiempo que el estratega intercambió empujones y fue jalado por gente de seguridad.

¿Cómo le fue a El Salvador en las eliminatorias de Concacaf?

Es importante resaltar que, al no estar México, Estados Unidos y Canadá en las eliminatorias de Concacaf, se esperaba que los equipos centroamericanos como El Salvador sacaran provecho para poder llegar al Mundial 2026, cosa que no sucedió dado que Panamá fue el único de la región que lo logró, el resto fueron caribeños.

En su grupo, El Salvador fue último lugar con solamente tres puntos que fueron producto de una victoria y cinco derrotas en estas eliminatorias de Concacaf, con lo que sellaron su fracaso.