El Tour de Francia 2025, que arranca este 5 de julio, reunirá a 176 ciclistas de 22 equipos, pero detrás del pelotón se moviliza una verdadera operación logística con miles de personas involucradas.

La transmisión televisiva es una de las más complejas del mundo deportivo: incluye camarógrafos en moto, helicópteros con cámaras aéreas, unidades móviles en salidas y llegadas, editores, productores y técnicos. Se estima que más de 500 personas trabajan solo en la cobertura audiovisual.

En cuanto a seguridad, la Gendarmería francesa despliega miles de efectivos para custodiar cada etapa. Bandereros, voluntarios, policías motorizados y servicios de emergencia garantizan la protección de ciclistas y público.

Además, la logística incluye hoteles, transporte, alimentación, mantenimiento, montaje y desmontaje de zonas de meta, caravana publicitaria y más de 2,000 vehículos oficiales en circulación.

El Tour es mucho más que una carrera: es un evento deportivo, turístico y mediático de escala global. Una maquinaria perfectamente coordinada que hace posible que, desde cualquier lugar del mundo, podamos seguir de cerca el espectáculo ciclista más importante del calendario.