En México, es común escuchar errores que, aunque parecen menores, muestran la falta de cultura ciclista que aún persiste en el país. Uno de los más frecuentes es llamar “Copa del Mundo” al Campeonato del Mundo de Ruta. No, no es lo mismo.
El Campeonato del Mundo es una carrera única y de un día, la más prestigiosa del calendario UCI, en la que el vencedor se lleva el arcoíris y el derecho a portar ese maillot durante toda la temporada siguiente. En cambio, la Copa del Mundo fue un serial de carreras de un día que existió en los años 90 y principios de los 2000, reemplazado después por Copas de Naciones . Hoy, hablar de “Copa del Mundo” en ciclismo de ruta es un error que solo evidencia desconocimiento.
El mal uso del ranking
Otro error común es declarar que un ciclista es “el mejor del mundo” simplemente porque encabeza el ranking UCI. Ese listado premia la regularidad y la acumulación de puntos en distintas competencias, pero no siempre coincide con el ciclista más dominante del momento. Un corredor puede ganar muchas pruebas menores y escalar en el ranking, mientras otro se enfoca en objetivos grandes como el Tour de Francia o el propio Mundial.
Por eso, confundir ranking con supremacía es simplificar en exceso. El verdadero “mejor ciclista del mundo” se mide por jerarquía, por victorias en los escenarios más duros y prestigiosos.
El caso Isaac del Toro
Lamentablemente, estos malentendidos ocurren justo cuando México vive un momento histórico con Isaac del Toro, un ciclista que ya está entre los mejores del planeta. Su séptimo lugar en el Campeonato del Mundo de Ruta en Kigali lo confirma: no necesita que inflemos datos ni confundamos términos, porque su pedaleo habla por él.
Una llamada de atención
Es una lástima que tengamos tan poca cultura ciclista en nuestro país. La precisión en el lenguaje no es un capricho, es respeto al deporte. Si queremos que el ciclismo en México crezca, necesitamos medios, comentaristas y aficionados mejor informados.
Llamar las cosas por su nombre y entender la diferencia entre un ranking y un campeonato es el primer paso para valorar de verdad el nivel de los corredores. Y más ahora, que tenemos a un mexicano de talla mundial, cuyo talento no merece ser reducido por la ignorancia de quienes no se toman la molestia de comprender este deporte.