Un regalo de Navidad para el quinteto de Los Ángeles, Lakers, durante el enfrentamiento contra Dallas, Mavericks, el conjunto angelino se dejó llevar, haciendo de una contienda algo extraordinario, con un 138-115, a LeBron James, le brillaba más la sonrisa que el anillo de oro.

 Luego de caer ante Clippers, en el primer partido de la temporada 2020-21, los Lakers, lo hacen y el 25 de diciembre, retomaron el camino de las victorias, dejando a los Mavs, sin posibilidades.

 El refuerzo, Montrezl Harrell, se lució, marcando puntos para los angelinos y probablemente podría ser por el estilo que llevó a la cancha, luciendo unos tenis Reebok con peluche, Anthony Davis, se burlaba de su compañero, pero pareciera que esos tenis tenían magia; aunque no fue el único, pues todos sintieron curiosidad por el tipo de zapatillas que llevaba.

Adoc a la temporada, espíritu Navideño o ¿qué habrá sido?

Por otra parte luego de las risas de Davis a su compañero, le llegó la sorpresa, pues en una jugada de Trey Burcke, dejaría sangrando al ala-pívot, Anthony Davis, con un codazo que no se marcaría como falta, ya que se considero un accidente por parte de la misma inercia de la jugada.