No cabe duda de que Novak Djokovic es uno de los mejores tenistas de la historia y así lo demostró la madrugada de este domingo cuando se coronó, por séptima ocasión, como campeón del Abierto de Australia tras derrotar de manera contundente a Rafael Nadal en tres sets corridos por 6-3, 6-2 y 6-3. 

El serbio tuvo una final de ensueño, pues dominó la pista de principio a fin. El primer set se lo llevó sin muchas complicaciones, pues le bastó con quebrar el saque del español en una ocasión para adjudicárselo. 

Aunque Nadal puso un poco más de resistencia al principio del segundo episodio, el serbio mantuvo un nivel superlativo para quebrar en dos ocasiones y terminar ganando el set 6-2, mientras que en el tercer capítulo volvió a quebrar rápido para después mantener su saque y así sellar el histórico campeonato. 

Con este contundente triunfo, el serbio no solo superó a Roger Federer como el máximo ganador en la historia del Abierto de Australia con siete títulos, sino que también desplazó al histórico Pete Sampras al llegar a su decimoquinto trofeo de Grand Slam, colocándose a dos de Nadal (17) y a cinco del ’Su Majestad’ (20).