Cuando todo parecía indicar que el Rebaño se llevaría la gloria, apareció Carlos Guzmán en el último suspiro para sentenciar la igualada.

México.- Un encuentro no apto para cardíacos se registró en el Estadio Victoria de Aguascalientes debido a que Necaxa y Chivas empataron a tres goles después de que se registraran un par de volteretas.

El cuadro rojiblanco se adelantó a los 28 minutos gracias a un autogol de Ventura Alvarado, quien además cometió un penalti más tarde. Pese a que los rojiblancos dominaron el resto del primer lapso, tampoco es que fueran una arrolladora y todo terminó sereno.

Situación que cambió drásticamente en la segunda parte, pues Brian Fernández marcó un doblete en menos de diez minutos. La primera de sus dianas cayó al 51’ luego de que culminara una triangulación excelsa; más tarde partió la portería de Raúl Gudiño tras sacar un riflazo que coronó una exquisita jugada individual.

Justo después de eso comenzó el lapso más emocionante del compromiso, y es que Ángel Sepúlveda falló una pena máxima al tirar de forma displicente. Como se sabe, gol fallado es gol en contra, ya que Alan Pulido sí hizo efectivo un tiro desde los once pasos al 82’ de tiempo corrido.

La noche se le vino a los Rayos con la anotación que Ronaldo Cisneros consiguió en el último minuto del tiempo regular, mas en el futbol nada está escrito y Carlos Guzmán logró empatar los cartones mediante un formidable cabezazo que techó a Gudiño al 94’.

Chivas avanzó de manera provisional al quinto peldaño al sumar 11 unidades, por su lado, Necaxa está un escalón arriba con el mismo número de puntos sumados, pues cuenta con una mejor diferencia de goles tras seis juegos disputados en el Clausura 2019.