Cuando todo era alegría y felicidad, el Camp Nou se convirtió en la capital de la incertidumbre y el miedo debido a una lesión de Lionel Messi que lo obligó a abandonar el campo de juego ante el Sevilla. 

El escalofriante momento se vivió cuando el partido ya iba 2-0 a favor de los culés gracias a una asistencia y un tanto del argentino, quien minutos después de marcar su gol sufrió una terrible lesión en el codo derecho, producto de una mala caída tras disputar el balón en mediocampo. 

De inmediato Messi fue atendido por el cuerpo médico del Barça, mientras que el Camp Nou vivió una gran incertidumbre al ver a su máximo ídolo tendido sobre el terreno de juego, una imagen que se ha visto pocas veces en la carrera del argentino. 

Messi no pudo seguir en el campo de juego, por lo que tuvo que ser sustituido al minuto 26; en su lugar entró Ousmane Dembélé. 

Lo más probable es que Messi haya sufrido una luxación en el codo derecho, lesión que lo dejaría fuera por los próximos 10 o 15 días, con lo que se perdería el duelo de Champions League a mitad de semana anta el Inter de Milán y el del próximo fin de semana ante el Real Madrid en una edición más del clásico de España.